22 de octubre de 2014

Y hacer poesía contigo




Quiero hacer poesía con tus labios, con tus dedos, con tus letras y con tus puntos suspensivos. Analizarte, comentarte y escribirte todos los argumentos que me han llevado a tu precipicio, a tu caída libre sin coherencia y sin sentido. Quiero hacer de ti literatura para poder vagar entre tus páginas sin temor a perderme el mundo. Oler el aroma a aventuras que supone la gran historia que inspiras y robarte el café un domingo por la mañana justo antes de dejarme llevar por los sentidos. Leerte en braille y escuchar tu risa entre mis dedos. Ver tu cursiva afilada y aceptarla como un beso frío en pleno mes de enero. Descubrir tus misterios ignorando las pistas de tus ojos y dejarme llevar por la intuición agudizada con el sabor de tus palabras. Quiero convertirte en ese libro robado que te cautiva y seduce hasta el punto de no quererlo devolver. Esconderte entre mis sábanas y leerte a todas horas cuando el mundo me deje sorda con sus esperpentos. Esconderte entre mis sábanas y no dejar que nadie descubra tus secretos. Transformarte en el sonido de las olas y dejar que te deshagas entre mis piedras a cada segundo, y que vuelvas siempre. Que vuelvas siempre a acariciarme y a susurrarme tus gemidos ignorando las despedidas y los puntos finales. Quiero que me enseñes a escribir de esa manera tan bonita de sonreír que tienes. Quiero ser tu aprendiz y hacer poesía contigo.